La guerra de promociones colocó al país entre los más baratos a la hora de contratar una conexión a Internet de banda ancha.El promedio de las velocidades más utilizadas –entre 256 kilobytes por segundo (Kbps) y 1 megabyte por segundo (Mbps)– cuesta u$s 16,57, contra u$s 39,95 en Chile; u$s 34,09 en Colombia y u$s 67,52 en Perú.Según el último resultado del Barómetro Cisco de la Banda Ancha, el estudio que mide la inserción del servicio en distintos países, la Argentina también se diferencia de los otros mercados en la escasa diferencia entre el precio de una conexión de 256 Kbps y una de hasta 1 Mbps. Mientras la primera cuesta u$s 16,19, la segunda vale u$s 16,66. En cambio, en Chile pasa de u$s 37,01 (los 256 Kbps) a u$s 42,77 (1 Mbps) y en Perú, de u$s 55,97 a u$s 87,32.Por supuesto, la calificación de “caro” o “barato” es relativo y exige la comparación con una variable representativa. A diferencia de lo que sucede con el hardware, las conexiones de banda ancha representan apenas el 5,2% del salario promedio (u$s 320), contra el 7,05% de lo que significa en el país trasandino, donde el ingreso medio asciende a u$s 605.Gracias a las agresivas estrategias de comercialización, las cuentas de Internet de alta velocidad ascendieron a 2.058.109 a junio pasado, contra las 1.583.913 que había a diciembre último, según el estudio que realiza Cisco desde 2005, cuando había 953.039 conexiones. PenetraciónEste número representa una penetración del 5%, la segunda más importante de la región después de Chile (8%) y antes que Brasil (4%) o Colombia (2%). El promedio latinoamericano es del 2,7%, muy atrás de lo que sucede en países como Estados Unidos (19%), Francia (21%) o Hong Kong (25%).Sin embargo, el ritmo de crecimiento es elevado y permite pensar que se puede acelerar la obtención de la meta propuesta en 2005 por Cisco de llegar a 4 millones de conexiones en 2010 en todo el país. “Debemos pensar en la banda ancha como un servicio público más al que debe acceder toda la población”, opinó Horacio Werner, gerente General de la compañía tecnológica.Aún así, la distribución del servicio sigue siendo desigual. La ciudad de Buenos Aires concentra el 29,6% de las cuentas, seguida por la provincia de Buenos Aires con el 5,2%. Córdoba es la tercera en número de conexiones (98.500), pero cuarta en inserción, con el 3%, después de Mendoza, que tiene el 3,6%, pero menos cuentas que la provincia mediterránea (60.823). La más rezagada es Jujuy, con sólo 638 conexiones y apenas un 0,1% de penetración.Según el estudio, entre los inhibidores de que la prestación se extienda está la ausencia de una planificación a nivel nacional, así como la necesidad de mayor inversión y la falta de regulación en innovaciones tecnológicas, como el servicio de telefonía por Internet
